jueves, 9 de julio de 2009

Borrachera


"El mundo gira y gira. Ya no me divierte, ya no estoy contento, ya no me rió, ya no... Y todo, sigue dando vueltas, pero me quiero bajar. Y todo, cada vez es más lento y más triste y más doloroso. El mundo sigue girando y yo tan solo quiero bajar."

Eso es lo que encontré escrito hoy a la mañana en un papel mal cortado y desprolijo. Era mi letra sin lugar a dudas, era obvio que lo había escrito yo. Este bendito papel, es un extracto, mejor dicho lo único que pude rescatar y entender en esa hoja oficio semi-vomitada. Imagínense que la mitad no solo no la entendía, sino que esta vomitada, y quedaba un pedazo mínimo sano y tenia escrito esto. Hubiese sido interesante que pudiera leer todo lo que escribí en este "estado".
Estar borracho no es nada gratificante. Ni si quiera al principio (en contradicción a lo que dicen muchos), cuando uno cae en la cuenta de que esta borracho suele ser angustiante, porque uno siempre sabe aunque más no sea mínimamente lo que esta haciendo. Y les aseguro verse a uno mismo degradado a tal punto es tan degradante. En principio, suele ser entretenido, es hasta divertido (pero jamás gratificante). Voy a describir algunas de las tantas pelotudeces que hice. Como por ejemplo, comencé haciendo un pogo solo, mejor dicho, con el lavarropas la pared y algunas sillas al ritmo de "La Argentinidad Al Palo" de mi querida Bersuit Vergarabat; inmediatemte llame al 110 para pedir el numero de teléfono de Mirtha Legrad, es obvio que me cortaron; luego y con unas copas mas en mi haber corrí desnudo por la terraza de mi casa gritando "Viva Perón, compañeros. Viva el General" y después le gritaba asquerosidades a las viejas del barrio (fue solamente a dos viejas, que espero, no ver jamás en mi puta life). Puedo decir que soy de los borrachos jodones y no de los tristones, ni los violentos.
Más tarde y ya correctamente vestido, las cosas dejaron de ser divertidas y empecé a decir, sin poder controlar todo lo que pensaba, a decir LA VERDAD. Eso es terrible señores, quién sabe todo lo que dije y lo que dije es verdad, no hay lugar a decir "No, era una joda", era pura absolutamente verdadero.
Sinceramente, las cosas se fueron poniendo peor, lamente haber tomado el champagne, el licor y la cerveza. Lo lamentaba, pero yo supe desde el primer momento que quería saber qué era estar borracho, cómo era eso. Y además estaba en mi casa, con mi mamá y mi abuelo (Obvio que no lo sabían mientras yo lo hacia) así que si las cosas se ponian feas ellos me iban a ayudar y tampoco estaba arruinándole el día, ni la fiesta, ni nada a nadie. De todas formas emborracharme solo es bastante triste, pero yo por las antes mencionadas razones lo elegi de esta manera.
Dormí fue casi una odisea, porque dormia y me mareaba, y fue asi hasta que vomite por segunda vez y entonces se calmaron las cosas. La primera vez que vomite, me quede dormido sobre el vomito, cosa realmente asquerosa. Como lo fue todo. Jamás volvería a tener esta experiencia, porque tomar algunas bebidas alcohólicas es riquísimo y que lago placentero se vuelva terrorífico como lo es estar borracho es realmente una porquería. Es terrible y es tan triste que le espejo nos devuelva la peor imagén de nosotros mismos y les aseguro que esta es una de las tantas cosas que nos degradan en lo más intimo. Una de las peores cosas de esto es que uno nunca termina de perder la conciencia y sabes perfectamente que estas haciendo cosas que te rebajan y te hacen ser tan poca cosa, e tan trista la imagén que le deuelve el espejo a un borracho. Y despues te levantas y todo te duele te seguis lamentedo por haber hecho semejante idiotez, porque yo sabia que me iba a doler, que me iba a hacer mal, pero la curiosidad fue más fuerte.
Asi que sin más que lo dicho y con la tacita pero obvia recomendación de que no intenten hacer esta estúpidez, me despido hasta el próximo pecado.

1 comentario: